Una familia cubana denunció este martes el robo de su embarcación pesquera en La Habana por un grupo de 11 balseros recién llegados a las costas de Miami, Florida, quienes se encuentran detenidos actualmente en Estados Unidos.
De acuerdo con Martí Noticias, el caso salió a la luz pública en redes sociales, cuando miles de internautas desearon suerte a los migrantes, mientras los dueños del bote revelaban el drama que viven ahora en la capital de la isla.
“Ese es el trabajo de toda la vida de mi padre. Todo su dinero. Mi papá es pescador desde niño. Siempre quiso tener un barco y lo logró con todo su sacrificio, y ahora se lo han robado”, manifestó al periodista Mario Pentón, del citado medio, Claudia Rico Eleveñil, hija del propietario de la embarcación.
Desesperación familiar
En la entrevista exclusiva, la joven destacó que toda su familia vive de la pesca y “ahora mismo nos hemos quedado sin nada”, un pensamiento que cobra sentido al conocer que, en estos casos, la Guardia Costera estadounidense no regresa los navíos a la nación caribeña.
El diálogo también contó con la presencia de Ariel Rico Figueroa, de 51 años y quien compartió con Martí Noticias la propiedad a su nombre de la embarcación. “Me llevó el barco. Yo lo que quiero es que se haga justicia en la vida real. Una gente a la que le maté el hambre, al que ayudé a trabajar, incluso a su hijo. Me robó el sueño de mi vida”, expuso Rico en una de sus respuestas a Pentón.
“Muchos comentan en las redes: 'qué bueno que llegaron', pero no saben lo que dejaron detrás. Robaron y dejaron a una familia sin su sustento, y eso no es justo”, añadió Claudia Rico en medio del intercambio.
Asimismo, padre e hija comentaron que la embarcación cuesta alrededor de 17,000 dólares, una cifra extremadamente alta si se tiene en cuenta que el salario mínimo en Cuba es de 2,100 CUP, unos seis dólares en el mercado informal de cambio de divisas.
Los balseros, por su parte, arribaron a territorio estadounidense en el bote pesquero, según se puede apreciar en una imagen difundida en la red social X (anteriormente Twitter) por Samuel Briggs II, jefe del Sector Miami de la Patrulla Fronteriza. La publicación indica que tocaron tierra en Key West, y señala que partieron de La Habana. "La investigación está en curso", concluye el texto, en el cual no se brindan precisiones sobre las circunstancias en que fueron detenidos.
Defensa legal de los balseros
En declaraciones igualmente a Martí Noticias, la abogada de inmigración Rosaly Chaviano aseguró que los migrantes tienen derecho a una defensa y “hablar con un abogado antes de hacer el (procedimiento de) miedo creíble para que sean preparados para su entrevista”.
En tanto, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos toma en cuenta varios elementos para decidir dejar en libertad a un detenido, por ejemplo, si ha sido deportado con anterioridad o tiene delitos en el país, comentó la especialista.
No obstante, el gobierno de EE.UU. continúa insistiendo en que todas las personas que intenten o lleguen ilegalmente por mar no podrán permanecer en el país, serán procesadas de acuerdo con las leyes y políticas estadounidenses, y retornadas a su país de origen o al punto de partida.
A finales de mayo, la Guardia Costera de Estados Unidos informó que repatrió a Cuba a 18 inmigrantes que fueron detenidos en altamar, al tiempo que una semana antes devolvió a otras 31 personas.
El éxodo de migrantes cubanos, principalmente rumbo a Estados Unidos, ya sea por vía marítima o terrestre, no da señales de llegar a su fin. En abril, 17,870 cubanos arribaron por mar y tierra al país norteño, según estadísticas del Departamento de Aduanas y Protección Fronteriza.